GP-

Ver en el diario una foto del lugar.

sentarme y mirar una y otra vez esa pared, lo verde carcomiendo hermosamente todo.
Lo roto como parte inexorable de esa belleza inmensa.

Tu sonrisa. El diálogo equidistante:

-te necesito para acordarme de este lugar que sé que no voy a olvidar.

-me vas a preguntar y poco a poco voy a describir: te vas a acordar, aunque esto, tal vez, nunca suceda. Aquella reminiscencia del amor como llave de ninguna puerta
late

dentro tuyo.

-y tuyo.

Silencio. En sí mismo, el oximoron de nuestro amor, nos hizo.

Celebremos,
siempre, que haya sucedido.

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Esperando que haya una vida más real

Pido a un dios que no existe
Estar en el anden indicado.

El reloj
No marca ningún lugar

Camila- Verano/Invierno 2014